La coherencia entre amistad y respeto, entre ideas y prácticas, entre militancia y principios éticos y entre compromiso y acción política fueron las características de la vida, de los escritos y del discurso de Andrés Soliz Rada durante su vida pública en más de cincuenta años de presencia en los ámbitos familiar, cotidiano, periodístico, político, intelectual y universitario, bajo los principios de la Izquierda Nacional y con el reconocimiento tanto de quienes compartieron sus ideas, como de quienes no lo hacían.

La izquierda Nacional en Bolivia y América Latina plantó las tesis fundamentales sobre la Cuestión Nacional y la Liberación Nacional, la contradicción fundamental entre  Semicolonia e Imperialismo, la Unidad de la Patria Grande en el contexto de las disputas hegemónicas mundiales, el diálogo y debate entre Marxismo y Nacionalismo y la Defensa de los Recursos Naturales, la Soberanía y la Dignidad, analizando y estudiando la historia, el pensamiento propio latinoamericano y la teoría revolucionaria.

En el pensamiento de “Chichi” Soliz se cruzaban y sintetizaban los aportes de Simón Bolivar, Simón Rodriguez, José Vasconcelos, Manuel Ugarte, Jorge Abelardo Ramos, Sergio Almaraz, Eduardo Galeano, Carlos Montenegro, René Zavaleta, Augusto Céspedes, Victor Raúl Haya de la Torre, José Carlos Mariátegui, Alberto Methol o “Tambor” Vargas con los de Carlos Marx, Vladimir Lenin, Federico List o León Trotsky, entre otros, para desentrañar los vericuetos de la historia con el objetivo de fortalecer la causa de la liberación de la Patria Boliviana y de la Nación Latinoamericana, lo que se advierte en sus libros, ensayos, reportajes, discursos, conferencias, debates, entrevistas y miles de artículos de prensa publicados en todo el mundo.

De ahí que hitos históricos como los levantamientos indígenas, las guerrillas de la independencia, las guerras bolivarianas por la integración continental, el proteccionismo de Isidoro Belzu en Bolivia o de Solano Lopez en Paraguay, el pensamiento de la “generación del 900”, la Revolución Mexicana, la resistencia de Sandino, el nacionalismo de Lázaro Cárdenas, Juan Domingo Perón o Getulio Vargas, la Revolución Nacional de 1952, la Revolución Socialista en Cuba con el liderazgo de Fidel Castro, los gobiernos de militares como Germán Busch, Gualberto Villarroel, Alfredo Ovando Candia o Juan José Torrez, la revolución sandinista, la resistencia antineoliberal y el proceso de unidad e integración latinoamericana y caribeña en los primeros tres lustros del siglo XXI adquieren una línea de comprensión argumentativa frente al colonialismo, la dominación, la explotación, la dependencia y la opresión colonialista e imperialista en Bolivia y América Latina.

En su vida política se destacan su militancia y conducción en el Grupo Revolucionario Octubre (GRO), al influjo e influencia de Sergio Almaraz y Adolfo Perelman, en los años sesenta, setenta y ochenta, su aporte político e ideológico al proyecto antineoliberal  de Conciencia de Patria (CONDEPA) en los años noventa y posteriormente su  participación en la Nacionalización de los Hidrocarburos el primero de mayo de 2006 durante la primera gestión del presidente Evo Morales Ayma. En esa perspectiva sus ideas se plasmaron en la Tesis Política de los Trabajadores de la Prensa en 1970, su críticas a la democracia tutelada por el imperialismo en los ochenta, el Libro del Modelo Endógeno en 1996, en su investigación La fortuna del Presidente  en 1997, en el Decreto de Nacionalización en 2006, en la Luz en el Túnel en 2014 y en La ideología de la Izquierda en Bolivia en 2015.

En este último libro Andrés Soliz Rada advertía tanto de los peligros de la desintegración de Bolivia por acción de las fuerzas centrifugas del federalismo, el separatismo y las autonomías descontroladas, como de las tendencias conservadoras y oligárquicas que antes conspiraron contra gobiernos nacionalistas y revolucionarios, respaldados con la provocación de la ultraizquierda, como lo hicieron contra Gualberto Villarroel, contra el último gobierno de la Revolución Nacional en declive, contra Juan José Torrez o contra la Unidad Democrática y Popular (UDP).

Fue dirigente del Sindicato y de la Federación de los Trabajadores de la Prensa de Bolivia (FTPB), Vicepresidente de la Federación Latinoamericana de Periodistas (FELAP), Secretario de Prensa de la Central Obrera Boliviana (COB), periodista y jefe de prensa de radios, periódicos, revistas y agencias internacionales, profesor universitario, diputado, senador y Ministro de Hidrocarburos

En síntesis: Andrés Soliz Rada fue un patriota boliviano y latinoamericano a toda prueba y un maestro de la lucha revolucionaria antiimperialista y del socialismo latinoamericano.